¡LEERLES EN VOZ ALTA A LOS NIÑOS LES AYUDARÁ DE MUCHAS MANERAS!
Leer junto con su niño será una experiencia sumamente placentera para ambos. Cuando se comparte un libro, también se comparte un momento especial de intimidad donde Ud. y su niño se prestan completa atención. Es una ocasión en que se dicen: "Tú eres muy importante para mí". Aun cuando se tiene un "mal día", leer juntos reestablece la paz y el amor en el hogar.
- Leerle al niño en voz alta le ayuda a desarrollar su lenguaje. A través de los libros, los niños aprenden palabras nuevas, pues escuchan un vocabulario distinto del que se usa en la conversación diaria. Las imágenes de los libros infantiles, llenas de colorido, ayudan a darle significado a las palabras.
- La lectura prepara a los niños para tener éxito en la escuela. ¡Oír leer en voz alta ayuda a los niños a aprender a escuchar! Mientras siguen la lectura, aprenden que esos «signos» en las páginas tienen un significado especial y esto les da las bases que necesitan para aprender a leer. Cuando se alargan los períodos de lectura, también se les ayuda a ampliar su capacidad de concentración, que es un factor importante para tener éxito en la escuela.
- La lectura brinda a los niños nuevas experiencias. Sus pequeños pueden aprender sobre una granja aun antes de visitarla. Las ilustraciones de gallinas, cerditos y maizales les dan una idea sobre lo que es una granja. De esa misma manera, pueden "viajar" a la luna o al fondo del océano, a través de los libros.
- Los libros pueden preparar al niño para su primera visita al dentista o para su primer día de escuela. Por medio de los libros, los niños pueden aprender sobre aquella gente que es diferente a la que ellos conocen. Leer sobre lo que no se conoce ayuda a no tenerle miedo. ¡Los libros amplían la visión del mundo en los niños!
- Compartir cuentos con su niño le ayudará a enfrentarse con los problemas que se le puedan presentar. ¿Cree él que nadie lo quiere? o ¿Piensa que nunca va a aprender a escribir su nombre? Muchos de los personajes de los libros tienen también estas mismas preocupaciones. ¡Leer sobre estos problemas puede serle de mucha utilidad al niño!
- Los libros pueden ayudar a desarrollar la imaginación del niño, pues enseñan a pensar creativamente sobre la vida. Mientras escucha cuentos, el niño puede imaginarse diferentes alternativas para su propia realidad.
- Los libros facilitan la labor de los padres. Una vez que su niño haya aprendido a disfrutar de la lectura, los libros se convertirán en un pasatiempo muy ameno. Cuando tenga que esperar para que lo atienda el doctor o cuando tenga que quedarse quieto en el automóvil, la lectura le ayudará a pasar el tiempo ¡más alegre y tranquilamente!
- Pero la mejor razón para compartir los libros con su niño es ésta: ¡leer es un placer! Los libros pueden ser graciosos, asombrosos, tristes o inspiradores. Sus ilustraciones pueden ser grandes obras de arte. Los libros nos brindan la oportunidad de relajarnos y olvidamos de nuestros problemas cotidianos. ¡Disfrute Ud. también el placer de la lectura y forme a sus niños con la ayuda de los libros!
¿CÓMO PUEDE ENSEÑARLE A SU NIÑO A AMAR LOS LIBROS?
Una de las mejores maneras es sirviendo de ejemplo. ¡Deje que sus niños lo vean leer! Cuando los niños ven a sus padres leer, aprenden que la lectura es valiosa. Los niños que gozan de la lectura provienen de familias que leen.
- Cuando Ud. lea algo interesante, coménteselo a su niño, así él aprenderá que los libros son un buen recurso para aprender cosas nuevas. Cuando lea algo gracioso, también compártalo con él, así su niño aprenderá que los libros son divertidos. Y cuando lea algo que lo entristece, compártalo también con su niño; esto le enseñará que los libros tienen el poder de conmover a los seres humanos.
- Múestrele a su niño que Ud. tiene libros favoritos. Trate a estos libros con delicadeza para demostrarle lo valiosos que son para Ud. Así su niño aprenderá que los libros son un tesoro que hay que cuidar.
CÓMO COMENZAR A LEER EN VOZ ALTA
Cuando Ud. comience a leer en voz alta, ¡prepárese para disfrutar de su éxito! Escoja un momento apropiado cuando su niño esté perceptivo y de buen humor. Asegúrese de haber apagado la televisión y el radio y concentre toda su atención en su niño. Acomódelo en su regazo o siéntese muy junto a él.
- Seleccione un libro que Ud. cree que le interesará a su niño e inicie la lectura con un cuento corto. Háblele de la portada y déjelo que disfrute de las ilustraciones. Hágale preguntas que despierten su curiosidad sobre el cuento. Por ejemplo: "¿por qué está triste el niño?" o "dónde se esconde el perrito?" Haciéndole preguntas lo prepara para escuchar.
DIVIÉRTANSE LEYENDO EN VOZ ALTA
Cuando lea en voz alta a su niño, ¡hágalo con entusiasmo! Escoja libros que a Ud. también le gustan. Emplee diferentes tonos de voz para los distintos personajes. Lea despacio disfrutando de cada palabra, pero lea rápido las partes emocionantes, usando a veces una voz suave y otras veces una voz fuerte para darle mayor significado a las palabras.
- A medida que avance en la lectura, haga preguntas sobre el cuento. Su niño gozará más del libro si platican sobre su contenido. Con los niños mayores, platique sobre el autor y el ilustrador. Pregúntele al niño porqué cree que el libro se hizo de cierta manera. Quizás su niño se interese por leer otros libros del mismo autor.
- Encuentre maneras de que los libros cobren vida. Por ejemplo, si están leyendo "¡Qué montón de tamales!", coman tamales o a la hora del baño, lean "El baño de Elmer". Cuando lean "Los tres lobitos y el cochino feroz", actúen el cuento y que cada quien represente el papel de un lobito.
- Observe la reacción de su niño hacia el libro. Haga comentarios sobre las ilustraciones y dele oportunidad de disfrutarlas. Responda a todas las preguntas que él tenga durante la lectura. No se impaciente si el niño pierde interés. No es necesario terminar el libro en una sentada; puede dejarlo de lado y terminarlo en otra ocasión, pero nunca obligue a un niño aburrido a estarse quieto y a escuchar. Continúe ofreciéndole los libros en forma positiva y pronto su niño aprenderá que, por medio de la lectura, puede compartir con Ud. un momento especial. ¡Cuándo menos lo espere, su niño querrá escuchar el cuento completo!